El parto

Hoy, pero un año atrás, a esta hora, ya me había bañado y me había acostado. Mi bebote dormía (el futuro hermanito mayor) y el papi también. Yo daba vueltas en la cama sin poder dormir, no por dolor porque no tenía, las contracciones eran de las que se te pone la panza dura, sino porque estaba más que ansiosa... sobre todo porque tenía miedo de llegar tarde al sanatorio (mi primer parto había sido rápido y llegué justo para tener a mi bebé, a pesar de que había llamado a la partera, que me había dicho que nos encontrábamos al otro día en el sanatorio por la mañana. Pero le rompí tanto las bolas de que no podía dormir que me dijo que fuéramos al sanatorio, y a las 6:14 había nacido mi primer hijo... la partera se había sorprendido porque llegué con dilatación completa y derechito a sala de partos, tres pujos y puff nació) Bueno, por todo eso estaba más que ansiosa, tenía miedo de no llegar. Me dediqué también a arruinarle el sueño una vez más, como no podía ser menos. Y a las 3:30 de la mañana me terminó diciendo que vaya al hospital, el médico me había dicho que apenas tuviera algunas contracciones fuera porque el primero había sido rápido.
Entre que llegó mi mamá a quedarse con mi principito y que preparamos todo, nos fuimos una hora después y llegamos al Hospi cerca de las 6:00 de la mañana.
Por suerte esta vez llegamos con tiempo suficiente como para que yo pueda desayunar tranquila medialunas y café con leche y escuchar Enya durante el trabajo de parto (música que me trajo la partera, una divina la mina!). Me hacía pis a cada rato (yo siempre me hago pis en los momentos que no debería -tengo una anécdota buenísima que después relataré-) me levantaba cada dos por tres y cuando me llevaron a la sala de parto me agarraron de nuevo las ganas y salté de la camilla y me fui al baño, con una enfermera que me hizo el aguante llevándome el suero y dejándome salir porque en realidad ya no podía salir de ahí, se escucharon unos gritos de fondo "nooooo, a dónde va? Ya no podés salir! se nos escapa!" Fui a hacer mi último pis antes del parto.
Mi bebota nació a las 11:45 y también rapidito, un par de pujos. Le pedí al médico que no me hiciera episiotomía y me respondió "Hasta acá tenés que dar órdenes! si fuera tu marido estaría preso por golpeador" (jajajaj que divino!!!) pero soy una paciente extremadamente rompe bolas, lo reconozco... y no podía pujar de la risa... pero me hizo caso y no me cortó pues que estuve como si nada hubiera pasado salvo la fofedad del abdomen que después se fue acomodando.
El papi todo el tiempo a mi lado, encargado del registro del momento para la posteridad... y super emocionado con su bebotita!
Mi pequeñita era la cosa más dulce y hermosa del mundo... tan chiquita, tan indefensa, tan frágil... con sus puntitos blancos en la naricita minúscula, porque casi no tenía ni nariz, un porotingui... me la pusieron en el pecho y decidí su nombre... habíamos pensado miles. Me gustaba (a mí) Cayetana (Cayetana Guillén Cuervo, la única que conozco con ese nombre, nació un 13 de Junio!!! De esto obvio me enteré después! No es re loco?) pero bueno, no le pude poner ese nombre porque todo el mundo me sacó cagando. También habíamos pensado "Antonia" (que también le gustaba al papá) pero que tampoco le pusimos, pero nació el día de San Antonio, otra casualidad...
Se parecía mucho a su hermanito, lloraba con la misma cara sólo que muy femenina, no a los gritos pelados sino snif, snif... llanto entrecortado y compujido... lloraba como mujercita...
Y después se la llevaron para todas las cosas de rutina, seguida por su papá.

IT´S ONLY LOVE! LOVELOVELOVELOVE!!!

"La gran hora del parto, la más rotunda hora:

estallan los relojes sintiendo tu alarido,

se abren todas las puertas del mundo,

de la aurora, y el sol nace en tu vientre,

donde encontró su nido"

Miguel Hernández